sábado, 5 de junio de 2010

ADIÓS CREATIVIDAD, ADIÓS VOL.1




LOS EX-PRESIDIARIOS COMEN HAMBURGUESAS


Inauguro esta nueva sección en la que analizaré, mejor o peor, algunos de los spots que se emiten en televisión que más carencia de creatividad y sentido común tienen en la actualidad.

Bien sabido es que la publicidad está perdiendo el poco sentido que le quedaba. Los anunciantes se gastan un dineral en campañas de publicidad que no valen un duro y que probablemente, perjudican su imagen más que mejorarla. Hay muchos casos a día de hoy de spots absurdos y que no hay por donde cogerlos.

El último que he visto en televisión y que me ha llamado mucho la atención es el de una conocida cadena de restaurantes de comida rápida.

El spot muestra con un cierto aire americano, (con un cover o yo que sé qué coño de tema que es una especie de versión de "At Folson Prison" de Johny Cash, pero con un aire de persecución sureña que tira para atrás) a un tipo que sale de la cárcel y al ver a su familia reunida para darle la bienvenida, prefiere salir corriendo.

Este señor, que por cierto sale vestido de la cárcel de traje de chaqueta al más puro estilo George Clooney en Oceans Eleven, comienza una "alocada" carrera por un supuesto barrio americano para entrar como un desesperado en uno de los restaurantes de la cadena de marras. La familia al llegar pone en cara de "este hombre es incorregible" y el hace el gestito de "venid, venid" o más bien dejad que los niños se acerquen a mi, porque digo yo que si estaba en la cárcel habrá hecho algo, no? quizá fuera acusado de ofrecer comida basura a los niños pequeños y ha sido condenado por intento de homicidio, no lo sabemos.

El spot además de con el nombre de la marca, cierra con un claim (slogan para los profanos) que hace alusión a seguir los instintos de cada uno. Entonces ahora analizo y el spot, nos dice:

- La gente que va a la cárcel come en estos restaurantes.

- Si sales de la cárcel, es bueno que sigas tu instinto, armes la marimorena por toda la ciudad, saltes por encima de coches, ancianos y todo lo que se te ponga por delante y te chasques unas costillas o una buena hamburguesa americana.

- La familia del protagonista está hasta los cojones del tipo, por lo que no sabemos si ha salido de una cárcel o de un psiquiátrico, porque después de que lo metan en la cárcel por vaya a saber usted por qué delito, en vez de abrazar a sus seres queridos, se va corriendo para comerse una hamburguesa y a perforarse las arterias con grasaca de la buena.

- Que si vas a uno de estos restaurantes te sentirás como un auténtico delincuente americano, recién salido de la cárcel... ou yeah! si Billy!! apuñalé a ese jodido sheriff por meterse en mis asuntos, aquel cargamento de whisky xxx era mío y de nadie más, jodidos maderos sureños...


Así que señoras y señores, tenga cuidado, no vaya a ser que la próxima que decidan comer auténtica comida made in USA le roben el monedero o le claven un tenedor en la espalda...

1 comentario:

  1. Doy la bienvenida a esta fantástica sección que seguro que disfrutaremos al máximo. Efectivamente el anuncio que usted está citando es el colmo de los despropósitos. Es malo desde el falso ambiente americano hasta la banda sonora con cierto tono a cantante con aerofagia.

    Este tipo de anuncios, al igual que los anuncios re-montados (género que supongo tratará en el futuro usted), te dejan con la baga sensación de haber visto algo demasiado elaborado para llegar a un concepto chorra.

    También es interesante la incongruencia del claim y el spot. Esto nos deja entrever que el spot está reutilizado para no gastarse pasta y que le han metido el claim de la campaña en prensa y exterior con calzador.

    En cualquier caso, y tecnicismos aparte, mi ilusión en este tipo de spots es la reinterpretación de la historia. Yo lo veo así:

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    Un ladrón de medio pelo que se dedica a dar golpes de poca monta en peluquerías y tiendas de pan y pico planea un atraco por todo lo alto.

    Tras una disparatada trama que se resume en una clara referencia a Ocean´s Eleven, el ladrón penco esconde los diamantes sustraídos en el alcantarillado de una obra cercana. Acto seguido es arrestado.

    Espera pacientemente su salida y cuando llega ese día todos los variopintos cómplices lo van a recoger a la puerta del presidio haciéndose pasa por una numerosa familia.

    Cuando el ladrón (posible cabecilla de la banda y pareja de arrejunte de alguna integrante femenina) sale por patas porque supone (muy acertadamente) que sus compinches lo van a coser a navajazos a la primera de cambio. Ellos salen corriendo detrás sin saber a dónde se dirige.

    Él busca desesperadamente la obra para eximirse de culpa y salvar su pellejo cuando descubre que aquella obra era un restaurante de comida basura con ínfulas celuloides. Él entra sudoroso en el local.

    Mientras la banda lo persigue por toda la ciudad dejando montañas de cadáveres a su paso. De repente pasan frente al ventanal del restaurante donde encuentran a su líder sentado en una mesa con una opípara cena y una sonrisa socarrona haciéndole señas para que entren. Ellos aprietan la empuñadura de sus machetes y sus navajas de mariposa.

    Al entrar (de después de recibir una puñalada en la pierna) el líder les cuenta la historia. Atónitos la banda se arremolina junto al jefe, que destapa una primera tanda de "Nachos San Fernando" dejando ver los diamantes nadando en una semi-sólida amalgama de carne y queso.

    Todos ríen alegres mientras comen felices, cuando de repente caen fulminados sobre sus platos. El ex-presidiario se gira hacia la cocina y alza su baso de refresco de cola con re-fill hacia la puerta, donde le corresponde Agatha, una de las peluqueras que cortejó en su etapa de ladronzuelo.

    Todo estaba planeado desde el principio.

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    ¿No es mágica la publicidad? ¿Verdad que no? Pues imagínenme haciendo segundas lecturas de los esos sainetes para pedófilos protagonizados por bebés en pañales haciendo "cositas" como los adultos.

    ASCAZO

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